Un comentario que cambió mi vida.

Un comentario que cambió mi vida.

Por Carlos Martínez León

Y así, en un abrir y cerrar de ojos pasaron dos años de pintura y diez de reflexiones profundas que dieron como resultado Journey Into the Unseen. 

Esta exhibición nació en el mes de abril del 2012, cuando viajaba a la exposición de ex alumnos de la Florence Academy of Art. Para aquel momento había superado años muy difíciles de mi periodo de formación académica y viajé a Florencia, con un poco de arrogancia a mostrar el resultado de 6meses trabajo. Una obra que llevaba como titulo, ¨Quiero que me mires, como te miro yo. Y en la que había trabajado obsesivamente con un único propósito, demostrar que estaba al mismo nivel de mis colegas.

Una de las cosas que he aprendido en el transcurso de estos años es que los pintores pintan para pintores, ¿Por qué? Quizás porque estamos mas capacitados para comprender la profundidad de los conocimientos de quienes se desempeñan al igual que nosotros en la búsqueda por la autorrealización artística, quizás porque encontramos en nuestros compañeros de camino voces que nos ayudan a entendernos a nosotros mismos, quizás porque son ellos, los que no ayudan a posicionar nuestra obra en el área en la que elegimos desempeñarnos. 

Llegue un lunes de abril a la estación de Santa MariaNovella, proveniente de Roma y me fui en taxi a Piazza Beccaria al apartamento de Elkin Cañas y Milixa Morón donde me quedaría unos días mientras duraba la muestra. Al llegar encontré que Ramiro Sánchez uno de mis mentores durante mi periodo de estudiante también me esperaba.

Después de dos años sin vernos, unas cuantas cervezas y un buen aperitivo, mire el tubo donde traía mi obra y los invite a la sala donde desenrolle la tela, sonriente mientras esperaba los elogios de quienes habían sido los referentes más importantes de mi carrera mientras estudie en Italia.

Al develar la obra encontré los comentarios que había esperado, buen acabado, buen efecto de luz y manejo de las proporciones, sin embargo en medio de las sonrisas y la alegría por el reencuentro, note enRamiro un silencio que me desconcertó.

Unas horas después cuando finalmente pudimos conversar en privado le pregunté honestamente lo que pensaba de la obra y está fue su respuesta.

Técnicamente la obra cumple con todo lo que esta exhibición exige, además tiene un buen formato que sin duda captará la atención de los espectadores, tiene una buena factura, pero, no tiene absolutamente nada que ver contigo.

Esta obra, no eres tu.

Ese comentario fue un estruendo en mi cabeza en medio de una noche silenciosa, que resonó con mucha fuerza durante toda esa semana, ¨Esa obra, no eres tú¨ se repetía con frecuencia en mi mente y me acompaño en todo el viaje de regreso a Maracaibo.

Unos días después de vuelta en mi estudio volví a ese momento que me había impactado tanto y en un instante de iluminación o simplemente de humildad me volví hacia el espejo y mirándome fijamente me hice la pregunta que iba a cambiar toda mi vida.

¿Quién eres?

Ese fue el momento en el que todo cambió y la chispa que originó la exhibición que hoy me encuentro presentando en Miami hasta el 30 de junio del 2022.

Si en algún momento te encuentras confundido o confundida y no sabes cual es el camino que debes desarrollar para encontrarte en el arte, pregúntate

¿Quién soy?

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